Ferndo

Si has entrado aquí es porque quieres saber algo sobre mi, así que te recomiendo que cierres esta página y escojas un artículo al azar en la wikipedia, será mucho más provechoso, créeme.
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Bueno, si sigues aquí te contaré que nací en Málaga en 1977, por lo que tengo taitantos años. Tuve una infancia muy feliz, disfruté de los arañazos en mis rodillas y de los churretes en mis carrillos, siempre arropado por el amor de mis padres y hermanas.

Me fui haciendo mayor y estudié la Licenciatura en Economía en Málaga. Creo que actualmente se imparte una asignatura de economía en el instituto, ciclo medio, ESO, Bachiller o como se llame... una pérdida de tiempo a mi humilde entender. Mucho más preferible enseñar a los niños matemáticas y sobre todo que NADIE regala duros a cuatro pesetas (¿euros a noventa céntimos?), el resto es tirar de sentido común.

Mi carrera profesional se ha desarrollado en el mundo empresarial, por un lado (el lado oscuro) en el sector de riesgos como analista de operaciones de financiación para entidades financieras; y después me pasé al bando Jedi en el departamento financiero de una empresa de construcción... hasta que lo dejé.

¿Y cómo, con la que está cayendo, dejas un trabajo para hacer algo así? Pues sencillamente porque, para mi, era el momento. Estoy seguro que de que para el resto de la humanidad no era "el momento", ni de lejos, pero ¡¡que diablos!! de vez en cuando habremos de hacer algo para nosotros mismos, ¿no?. Por desgracia carezco del léxico necesario para plasmar el estado mental que venía arrastrando, la amalgama de sentimientos, ideas y deseos que confluyeron para empujarme a dar un paso como este.

Por otro lado, esto es algo que tenía clavado desde hace ya varios años; probablemente desde la primera vez que hice el Camino de Santiago (¿todavía no lo has hecho? ¿a qué estás esperando?... ¡¿todavía sigues leyendo y no te has ido a hacerlo?!) Después del primero vinieron unos cuantos más, desde Madrid, Lisboa, Mérida, Bilbao, Roncesvalles... y un par de viajes largos; cruzar Alemania de sur a norte (¡¡¡Jorge!!!), y darle la vuelta a Irlanda. Lejos de apagar el deseo de emprender una viaje de verdad, alimentaron mi inquietud.

Intento ser consciente de las diferencias entre aquellos paseos y lo que quiero emprender. Cuando le contaba a alguien sobre el viaje de Irlanda o Alemania solía salir en la conversación la palabra aventura, cosa que siempre he negado por un sencillo motivo: en cualquier momento, en cualquier lugar, he podido salir de cualquier apuro simplemente con una tarjeta de crédito. Esta es la red de seguridad que quiero perder. Pero, tratando de ser mínimamente honesto conmigo mismo, no estoy preparado para hacerlo sin un periodo de transición; y eso es Canadá y Estados Unidos, un periodo de transición, antes de llegar a países donde la aventura, como tal, empiece a adquirir su pleno sentido.

Bien, espero que el blog te esté gustando, que en la medida de lo posible, consiga sacarte por un instante de tu rutina y viajes junto a mi por el lejano oeste.

Un saludo.
El interfecto haciendo el seguimiento a un plato de cocido maragato.